martes, 13 de abril de 2010

APUS DE LAS MONTAÑAS DE RÍO NEGRO-PATAGONIA

Los Apus (custodios) de las montañas que rodean a Bariloche me dijeron que ya era tiempo de que se hablara de la labor que yo había estado haciendo meses atrás como Custodia y Depositaria de Códigos sagrados en las distintas montañas de los alrededores, de la importancia de este lugar y de la importante labor que estuve haciendo durante meses, al inocular los códigos -que los hermanos estelares habían introducido en mi en Telos, ya que yo me desplazo en conciencia allí con facilidad- en las distintas montañas que fui sintiendo, para propiciar el resurgir de la Nueva Lemuria, con una base espiritual sólida y limpia de todo rastro de desorden.



Apus: Bienvenida la Conciencia Humana despierta a este contacto con nosotras, las estribaciones de la cordillera nor-patagónica; montañas que custodiamos, como los Apus que somos, la conciencia de la corteza terrestre.


Nosotras custodiamos ese aspecto de la vida que corresponde a este sector en la parte más austral de la Cordillera de los Andes, cordillera que se sumerge en el océano y que vuelve a dar vida en picos magníficos en la península antártica, haciendo todo un recorrido que da vueltas por todo lo que se conoce como el Cinturón de Fuego del Pacífico.


Todas nosotras, aunque la distancia física sea inmensa, estamos físicamente conectadas, tenemos raíces y por medio de ellas nos comunicamos con todo el resto de las cadenas y de las montañas emergidas y sumergidas, claro está, en ese perímetro que conformamos en el Cinturón de Fuego del Pacífico y un poco más allá, y también rodeamos, como las hermanas sobrevivientes, a aquellas que apenas logran emerger del océano sus altas cumbres hoy en forma de archipiélagos, algunos muy visitados por muchos seres humanos, pero en realidad son las más altas cumbres de un continente sumergido milenios atrás que está llamado a resurgir y a conformar una nueva geografía, la geográfica de la nueva Lemuria.


Nosotras aquí, en la Cordillera Nor-Patagónica, custodiamos conciencias de energías muy esenciales que van a permitir, en el momento preciso, la reaparición, el emerger de la aguas, de aquel continente, con sus vastísimas y altas cordilleras.


Este sector, aquí en el norte de la Patagonia, custodia buen parte de la memoria de aquella Lemuria y este sector está llamado a nuevamente iniciar el movimiento hacia su emergencia hacia su aparecer a la Conciencia Humana.


La Princesa Rowina nos ha visitado en varias ocasiones, trayendo un legado magnífico, aportado en combinación con los hermanos estelares, y en su compromiso absoluto con el espíritu, ha venido -acompañada por Igneón- a inocular esos códigos divinos que ella porta, para que nosotras tengamos la posibilidad de retomar la conexión con esa custodia; porque ha llegado el momento en que la sabiduría guardada durante milenios en nosotras, sea nuevamente activada en la Conciencia de la Humanidad consciente y, de ese modo, comience a moverse todo el engranaje geológico, para que ese continente vuelva a estar nuevamente fuera del agua.


Claro está que muchos otros continentes, en algunas de sus partes, han de hundirse en el fondo del océano, liberando así a la doncella Gaia de las presiones que tan intensamente ella ha estado guardando hasta ahora.


Nos dirigimos a la porción de la Conciencia Humana que está bien despierta, y a la que está comenzando a despertar, a la que se da cuenta de que la vida es algo más que un transcurrir en determinada cantidad de años: es el compromiso con el propio ser divino.


Esos códigos que nos han sido inoculados, nos permiten reactivar la Conciencia Planetaria, a través de nuestras raíces, todo el engranaje de movimientos tectónicos que van a permitir el renacer de la Nueva Lemuria física.


Son procesos que llevarán mucho tiempo de su tiempo, pero que están comenzando a hacer ya sus primeros movimientos.


Nosotras las montañas, los Apus que custodimos estos códigos, esta sabiduría, y ésta energía, os decimos que ya se están activando con fuerza.


Lo terremotos en distintas partes de Chile, y en distintas partes de la Cordillera de los Andes del océano pacífico, continuarán y no habrá una porción de ella que quede sin moverse, pues eso es consecuencia de la activación de la conciencia.


Es el llamado de la querida doncella Gaia, con su emanación de amor intenso, para que cada uno de sus habitantes pueda realinearse con ella, con su conciencia, para poder comenzar a dar los pasos hacia su propia Ascensión, que es la Ascensión de ustedes también.


Querida Humanidad consciente, bienvenida a esta nueva etapa de acción profunda en la Tierra y de acción profunda en el ser de cada uno de ustedes que la sostiene.


Rowina: Muchas gracias, queridos Apus, por este bonito mensaje. Me da mucha satisfacción saber que todo el sacrificio (sacro oficio) que hice al portar en mí estos códigos, va a dar este fruto tan maravilloso. Bien sabe la Madre Divina que portarlos no fue nada grato en muchísimas ocasiones, ya que se movían, me alteraban energética y emocionalmente, me producían molestias al sentarme…


Apus: Querida Rowina, tu gratitud encierra también la gratitud de la Conciencia Humana consciente, y eso es precisamente lo que nosotros recibimos con todo nuestro amor, porque es también un acuerdo de la Conciencia Humana con la Conciencia Planetaria, con la Conciencia de Gaia, para continuar con el proceso del resurgir de la Nueva Tierra.

1 comentario:

  1. adela infante dijo...
    La luz Divina de Dios permita que todo este resurgir de la nueva tierra, nos permita a todos despertar a la nueva conciencia.puedan realinearse con la madre gaia y recoger esos frutos maravillosos.
    Amooooo a los Custodios de esas montañas.

    Adela Infante Sttenger

    9 de abril de 2010 11:24

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